La chihuahua de dos años, de nombre Pearl, mide 9.14 cm de alto, 12.7 cm de largo y pesa solo 553 gramos. Este 9 de abril se convirtió oficialmente en la perra más chica del mundo según el registro de récords Guinness.
Viene de familia: la anterior poseedora del este título había sido Miracle Milly, tía de Pearl, quien murió en 2020. El récord se confirmó tras medirla en el Crystal Creek Animal Hospital de Orlando, donde nació. Cada medida se tomó desde la base del pie de la pata delantera hasta la parte superior de la cresta entre sus omóplatos en línea recta vertical.
Vanesa Sempler, propietaria de Pearl, expresó su emoción: «Tenemos la suerte de tenerla y de tener esta oportunidad única de romper nuestro propio récord y compartir con el mundo esta increíble noticia». A su vez, su dueña la describió como «pequeña como una pelota» y dijo que es un poco más alta que una taza.
