Ya hay problemas de abastecimiento en algunas ciudades fronterizas. En su mayoría, son chilenos que cruzan cada mes por el Paso Cristo Redentor (Mendoza) para llenar el changuito del supermercado.
La suba constante del precio del dólar, que esta semana llegó a su valor más alto, $495 (el martes), motiva día a día a miles de visitantes extranjeros a realizar sus compras en el país, beneficiados por el tipo de cambio. Es que el aumento del dólar en sus diferentes cotizaciones abarata los bienes y servicios que se venden dentro del país para los turistas vecinos.
Cabe recordar, que las compras que los extranjeros realizar con tarjeta de débito o crédito dentro del territorio nacional se convalidan con una cotización a valor dólar MEP ($436,94), con lo que obtienen una ventaja considerable respecto al valor del dólar oficial, que es el que se tomaba como referencia antes de noviembre del año pasado (hoy cotiza a $229). Muchos, además, recurren al mercado informal de cambios, donde obtienen una diferencia aún mayor (el dólar libre ronda hoy los $469).
Así, en las últimas semanas se ha visto en algunas ciudades “oleadas” de personas de países limítrofes que cruzan la frontera con el único fin de abastecerse de mercadería para sus hogares. “Antes los chilenos venían y compraban libros, cigarrillos o cuero. Hoy copan los supermercados y compran alimentos y otros productos de primera necesidad”, comentó Ezequiel Barberis, presidente de la Cámara de Turismo de Bariloche.
“Tenemos solo 250 kilómetros con la ciudad de Chile más cercana (Osorno). Por eso los chilenos vienen por el día, compran y se van. En cualquier supermercado se ven los autos con las patentes del país vecino”, agregó Barberis.
La misma situación que se vive en Bariloche, ocurre también en Mendoza y San Juan. En las últimas semanas han visitado las provincias cuyanas miles de turistas chilenos para hacer sus compras. Las distancias también son relativamente cortas (hay 277 kilómetros entre Los Andes y Ciudad de Mendoza), por lo que miles de familias cruzan durante uno o dos días para llenar sus baúles y emprender el regreso a casa.
Desde un supermercado mendocino, que tiene algunas sucursales tradicionales y otras mayoristas, reconocieron que la llegada masiva de turistas chilenos provocó desabastecimiento temporal en algunos productos. “Se están llevando todo y a veces no llegamos a reponer a tiempo, ya sea por falta de personal o por demoras de parte de los proveedores, que tampoco dan a basto”, señalaron.
También reconocieron que hubo algunas subas de precios al público provocadas por la mayor demanda. “No aumentamos, pero sí dimos por terminadas algunas promociones para tratar de equilibrar el stock”, justificaron.
Pero esta tendencia también se da en el norte y la mesopotamia local. Según un relevamiento hecho por la consultora en supermercados y mayoristas, durante el 2022 crecieron con fuerza las ventas en Clorinda, Formosa (33%); Iguazú (120%) y Posadas (16%), Misiones; Concordia (13%) y Gualeguaychú (27%), ambas de Entre Ríos.
Miles de uruguayos, brasileños y paraguayos cruzan la frontera en Iguazu para aprovechar el tipo de cambio.
“La diferencia de precios existe desde que hay brecha. Lo novedoso ahora es que después de la pandemia se profundizó con el rebrote inflacionario en muchos países de la región, que produjo un encarecimiento generalizado”, sostuvo Javier González, de Nielsen.
La tendencia no solo se mantuvo en el inicio de 2023, sino que se profundizó. Desde una empresa Misiones que distribuye productos a toda clase de negocios, en su mayoría mayoristas, aseguraron que en las últimas semanas el ritmo de reposición se duplicó en productos de primera necesidad, como aceites, harinas, carne, huevos y productos lácteos en general.
“Son los extranjeros los que se llevan todo. Consiguen muchos productos a la mitad del precio que cuesta en sus países gracias a la ventaja del tipo de cambio y los precios regulados por el Gobierno. A nosotros nos conviene, pero conozco casos de negocios que se quedaron sin stock de algunos productos y no pudieron abastecer a la demanda local durante algunos días”, comentaron.
De acuerdo al informe de Nielsen, las diferencias de precios oscilan entre 30% y 41%, según el producto, el tipo de compra y el formato de la sucursal.
