Lunes 2 de enero de 2016.
Navidad y Año Nuevo son fiestas que propician los excesos y el descontrol. Nuestra piel es el órgano que más sufre este descalabro. Por ello, enero es momento de limpiar y contrarrestar el maltrato sufrido y una buena oportunidad para asumir nuevos hábitos saludables, con la intención de sostenerlos en 2017
Dietas, jugos, mascarillas, cremas y champús.todo detox; cada vez son más los productos que se venden bajo esta etiqueta, con la anhelada promesa de desintoxicar y purificar el organismo.
Claro, el auge se explica fácil: aquel que no tenga la necesidad de desintoxicarse, que tire la primera piedra. Es que la polución ambiental, la mala alimentación y la falta de descanso favorecen la acumulación de toxinas.
Es cierto que el cuerpo tiene sus propios recursos para eliminarlas ; el hígado, los riñones, los pulmones y la piel se ocupan de hacerlo; pero "cuando hay excesos, el hígado se recarga, su papel de filtro detoxificante disminuye, y los demás órganos empiezan a padecer esa deficiencia", explica Virginia Busnelli, médica especialista en nutrición.
Es en esa instancia que los productos y alimentos detox pueden ayudar. "Las comidas de fácil digestión y reducidas en grasas facilitan la limpieza metabólica. Además, hay alimentos que poseen micronutrientes que potencian a las enzimas cuya función es eliminar toxinas del cuerpo", señala Busnelli. Las frutas y hortalizas son un buen ejemplo, ya que su aporte de fibras ayuda a liberar tóxicos y a limpiar el intestino.
Pero más allá de priorizar determinados alimentos o de seguir una dieta liviana, existen programas de desintoxicación en base a jugos de frutas y verduras prensadas en frío. Este sistema de depuración comenzó en Hollywood, donde varias celebrities, como Beyoncé y Gwyneth Paltrow, se hicieron adeptas, y pronto se popularizó.
Las empresas que se dedican a la venta de estos jugos -en Argentina ya hay varias- promueven una alimentación líquida, es decir que durante el período que dure el detox, que puede ser entre uno y 21 días, está prohibido ingerir alimentos sólidos, sólo se permiten los jugos, el agua y algunas infusiones.
Para Busnelli, "estas dietas basadas únicamente en jugos procesados son peligrosas si no se realizan bajo consulta y control médico, ya que el cuerpo dejar de recibir los nutrientes esenciales para las actividades diarias". Además, estas dietas restrictivas causan el famoso efecto rebote, según afirma Busnelli, "existe evidencia científica de que disminuir el aporte calórico no es detoxificante en absoluto y que son el mejor predictor de ganancia de peso a cuatro años".