Sábado 2 de julio de 2016.
La práctica de disciplinas orientales es más común entre los niños. Cuáles son y qué beneficios se logran. Recomendables.
La práctica de disciplinas orientales milenarias cada vez más cuenta con pequeños, o más bien, grandes seguidores. Chicos desde los 4 años comienzan a aprenderlas. La razón es simple, a esa edad empiezan a comprender y controlar sus emociones, a comunicarse y expresar sus sentimientos de manera más reflexiva. Por eso, el yoga, y otras actividades afines son elegidas por los padres como actividades extracurriculares. También, algunos colegios las incorporaron como parte de su propuesta educativa.
Particularmente el yoga se considera una herramienta poderosa, útil y preventiva, porque permite desarrollar habilidades sociales, como el autocontrol, la capacidad de detenerse y calmarse cuando uno está enojado y la habilidad de mantener la atención. El estrés, las sobreexigencias, las actividades sedentarias tan comunes y asociadas a las nuevas tecnologías causan problemas de atención, ansiedad, baja la autoestima, causa depresión, hiperactividad y contracturas musculares. Mediante el aprendizaje y la práctica sostenida de yoga, reiki, tai chi y artes marciales, se adquiere autoconfianza, mejora la concentración, aprenden a controlar sus emociones y a desarrollar su fuerza interior. Muy recomendables.
Yoga. Disciplina física y mental de origen indio; en sánscrito significa reunión de cuerpo, mente y espíritu. En las clases para chicos, a partir de los 6 años, que suelen ser grupales pero también hay individuales, aprenden asanas o posturas, como las llamadas el saludo al sol, la vela, del árbol, del león, la pinza, la rueda y de meditación, entre otras.
Beneficios. Aprenden a trabajar la respiración, mantener la atención, desarrollar la autoestima y la creatividad, comprenden cuáles son sus fortalezas y debilidades, aprender a manejarse entre la actividad y la relajación, y también lograanmejorar su flexibilidad y fuerza muscular.
Yoga music. Se trata de una actividad que combina mindfulness (conciencia de la meditación), música, percusión corporal, respiración, juegos y posiciones de yoga para chicos de todas las edades. Se puede hacer en cualquier lugar ,pero hay centros que enseñan esta técnica creada por la instructora de yoga Cynthia Zak Preuss. A partir de una canción que invita a sentir la respiración y el ritmo del corazón, aprenden a bajar los decibeles y se armoniza la energía.
Beneficios. Mejora la autoestima, baja el estrés, permite pensar y moverse libremente, frena el bullying, genera responsabilidad individual y social, permite alcanzar mayor confianza en sí mismo y en los adultos, y flexibiliza la mente y el cuerpo.
Reiki. Es una técnica de canalización y transmisión del ki o energía vital, de origen japonés con que se busca la sanación y el equilibrio bioenergético. Se practica mediante la imposición de manos en los centros energéticos del cuerpo o chakras, con el fin de transmitir energía y lograr el bienestar del cuerpo, mente y espíritu. Los chicos, de 4 a 12 años, pueden aprenderla y aplicarla a su propio cuerpo.
Beneficios. Promueve la relajación y la concentración, ayuda a superar situaciones traumáticas, a mejorar las relaciones interpersonales; es bueno para adquirir confianza, enfrentar situaciones de estrés, dormir mejor y mejorar el rendimiento escolar.
Tai chi. Es un arte marcial de origen chino, que consiste en una sucesión coordinada de movimientos lentos, suaves y precisos. Se desarrolla una serie articulada de movimientos de gran plasticidad, armonizados con la respiración; representa la conexión del hombre con la naturaleza, los cambios del cielo y la tierra, y del cosmos. Especial, para chicos desde los 10 años. Se complementa con técnicas de elongación y de flexibilización articular. Se trabaja para que la capacidad respiratoria se amplíe, eleva las energías defensivas y mejora el estado de ánimo y las emociones.
Beneficios. Desarrolla el equilibrio, fortalece los músculos, mejora la circulación, promueve la concentración, el autocontrol y la seguridad.
Artes marciales. A través de la dinámica del juego se aprenden técnicas de defensa personal, que buscan el conocimiento de uno mismo, el respeto por el otro, la disciplina, el orden, superación de metas personales y el desarrollo físico y mental. Se crea un espacio de contienda consigo mismo para desarrollar técnicas de combate orientadas a la evolución personal. Parte de una preparación física adecuada que permite una mejor conexión mente-cuerpo. Aumenta la seguridad, la fuerza, la confianza y la autoestima. Aprenden a enfrentarse con sus propios temores y dificultades, situaciones que obstaculizan su natural evolución y desenvolvimiento. Para chicos, de 4 a 12 años.
Beneficios. Coordinación motriz, fortalecimiento de la respiración y la musculatura, flexibilidad, elongación.
