29 marzo 2024

UNIVERSIDAD "GRATIS" Y SIN “INGRESO”

universidad

Viernes 30 de Octubre de 2015.

El Senado aprobó una ley que garantiza la gratuidad en las universidades públicas y prohíbe la posibilidad de implementar exámenes de ingreso. Además, la norma abre la puerta para que se puedan flexibilizar los requisitos para que los alumnos mantengan la condición regular.
El proyecto fue impulsado por la diputada del Frente para la Victoria (FpV) Adriana Puiggrós y surgió como una modificación a la Ley de Educación Superior. El principal cambio es la inclusión del artículo 2 bis, que establece la "prohibición de establecer cualquier tipo de gravamen, tasa, impuesto, arancel o tarifa" sobre las carreras de grado en las universidades públicas.
El texto de la norma define el ingreso a la educación universitaria como "libre e irrestricto". Los fundamentos del proyecto explican que este punto busca evitar que se restrinja el acceso a las facultades públicas vía "exámenes eliminatorios" u "otros mecanismos de exclusión".
Los expertos explicaron que esta modificación echa por tierra los cursos de nivelación que realizan algunas facultades. Uno de los casos emblemáticos es el de Medicina, en La Plata, cuyos bochazos masivos son noticia todos los años.
A partir de esta ley, cada universidad podrá definir los requisitos de regularidad de sus alumnos. Hasta ahora estaban obligados a aprobar como mínimo una materia por año -en algunos casos son dos-. Una vez que se reglamente la modificación sancionada en la Cámara Alta podrán definir criterios propios más flexibles.
Impacto en la Facultad de Medicina
En la serie de modificaciones a la Ley de Educación Superior Nº 24.521 de 1995 podría tener un fuerte impacto en la Universidad Nacional de La Plata.
Si bien el cambio más resonante tiene que ver con la consagración de la gratuidad de los estudios superiores de grado -hasta ahora, en ese sentido, regía un decreto de noviembre de 1949-, la Cámara Alta eliminó el párrafo del artículo 50 del que se vale la facultad de Medicina para establecer un sistema de admisión restrictivo.
Precisamente, es el que permitía a las Universidades con más de 50.000 alumnos que sea cada Facultad la que defina el sistema de ingreso a las carreras.