El 22 de septiembre se celebra el Día del Chocolate Blanco, la excusa perfecta para darse un gustito!
Aunque se desconoce por qué es precisamente hoy que se celebra su día, el dato que sí conocemos es que en 1930 se produjo el primer chocolate blanco comercial. Fue elaborado por la reconocida marca Nestlé y bautizado con el nombre de Galak.
El chocolate blanco forma parte de esa deliciosa familia compuesta por el chocolate negro, el chocolate de leche (y ahora el chocolate Rubí, que es color rosa). Como casi todas las cosas en la vida, así como tiene seguidores también tiene detractores, pues hay quienes dicen que no es propiamente chocolate, pues no lleva pasta ni sólidos de cacao.
Está elaborado a base de manteca de cacao, este ingrediente se procesa para eliminar su sabor fuerte. También contiene azúcar, y más que blanco, su color es marfil, siendo este último la característica que determina si una muestra es de buena calidad o no, pues lo que son más blancuzcos están elaborados básicamente de manteca vegetal o animal.
Para ser considerado un chocolate blanco de calidad, la normativa establece que debe contener 20% manteca de cacao, 14% sólidos lácteos, 3,5% grasa láctea y 55 por ciento azúcar.
Sus usos en repostería no son tan amplios como el chocolate negro, pues al fundirlo la consistencia no es la más idónea para ciertas preparaciones, ya que la grasa del cacao tiende a separarse y crea un compuesto oleoso, sin embargo es muy utilizado para coberturas de tortas y también en bombones.
