3 mayo 2024

65% de las mujeres cabeza de hogar se endeudan para comprar alimentos

Por los altos índices de inflación que degradan el poder adquisitivo del salario, quienes tienen hijos a cargo deben recurrir al financiamiento para poder llegar a fin de mes.

 

Mientras el ministro de Economía, Sergio Massa, se enfoca en llegar a la presidencia, los índices de inflación y el encarecimiento en el precio de los alientos lleva a la mitad de los argentinos a una situación de pobreza que cada vez se ve más reflejada en la calidad de vida.

Según un relevamiento de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), en conjunto con la ONU, el 65 por ciento de las mujeres con hijos menores a su cargo, recurre a algún tipo de financiamiento para poder llegar a fin de mes.

El dato se vuelve aún más doloroso, ya que las tres cuartas partes de esas mujeres que son cabeza de hogar, terminan en un espiral de endeudamiento del que no podrá salir jamás.

La información surge del “Primer informe sobre endeudamiento, géneros y cuidados en la Argentina 2023” realizado por la CEPAL y el Ministerio de Economía de la Nación. Del que se desprende que tres de cada cinco mujeres no reciben la obligación alimentaria en tiempo y forma.

“En Argentina, la brecha salarial, entre las mujeres que tienen un empleo formal y las que no, es de un 62%. El mayor ajuste recae doblemente sobre las espaldas de las mujeres, ya que no cuentan con educación financiera por parte del Estado”, señala el documento.

Del relevamiento se desprende que el 54% de los hogares de Argentina recurrió al financiamiento para poder cubrir los gastos básicos del mes. A lo que suma que el 60% de ellos, pertenece a familias encabezados por mujeres, de las cuales el 69% tiene trabajo informal.

Por su parte, en los hogares en los que hay niños, niñas y adolescentes, el 65% de los encabezados por mujeres recurre al financiamiento y de ellas el 73% lo usa para comprar alimento y medicamentos.

Asimismo el trabajo se enfoca en que la dificultad para acceder a financiamiento formal genera, en muchos casos, la necesidad de recurrir a diversas fuentes espurias, que suelen tener un costo financiero mayor o redundar en formas de dependencia personal improcedentes, que generan situaciones de elevada vulnerabilidad financiera.