Con el lema "Madre, abrazanos. Queremos seguir caminando", el sábado 3 de octubre se llevará a cabo la Peregrinación Juvenil a Luján en forma virtual. En esta edición, la número 46, es la Virgen de Luján la que llegará a los hogares de todos sus fieles a través de las redes sociales y los medios de comunicación.
Lunes 28 de septiembre de 2020.
Dada la instancia sanitaria que estamos atravesando por la pandemia ocasionada por el COVID-19, el Santuario de nuestra Virgen de Luján, permanece cerrado. Es por eso que desde la Comisión Arquidiocesana de Piedad Popular, junto con la Basílica de Luján y la Conferencia Episcopal Argentina están preparando una megatransmisión por http://peregrinacionlujan.org.ar/. "Les aseguramos a todos los peregrinos virtuales que el espíritu de entrega al caminar hacia la Virgen de Luján sigue intacto", señalaron los organzadores.
Se trata de una programación ómnibus que será transmitida por redes sociales desde las 6 de la mañana del sábado 3 de octubre y hasta la medianoche del mismo sábado. Los peregrinos virtuales podrán vivenciar el trayecto que une el santuario de San Cayetano y la Basílica de Luján como si estuvieran ahí. Y también participar en sincronía de la misa central que será presidida por el cardenal primado de la Argentina y arzobispo de Buenos Aires, monseñor Mario Aurelio Poli en la Basílica de Luján a las 19.00.
De acuerdo a lo que detallaron a LaNoticia1.com, la programación ómnibus constará de entrevistas, música, reflexiones, bendiciones virtuales y gestos que ya se vienen repitiendo en las Peregrinaciones a Luján. Por ejemplo, a las 18.00 se rezará el Rosario desde la Basílica de Luján y a las 19.00 se invitará al encendido de una vela al iniciarse la misa central para permanecer unidos por el espíritu peregrino. Otro gesto: cada una hora se rezará por una intención puntual que será anunciada por peregrinos de distintos puntos de país.
El asesor de la Comisión Arquidiocesana de Piedad Popular de la Peregrinación Juvenil a Pie a Luján, presbítero Juan Bautista Xatruch., remarcó que este año "con el corazón caminaremos sin salir de nuestra casa hasta la Casa de la Virgen y ella nos va abrazar". En ese sentido, recomendó "armar un altarcito en casa con una estampita o una imagen de la Virgen". "Es importante acercarnos, no con los pies, sino con el corazón, con un llamado, o llevando alimentos a esos hermanos nuestros que la están pasando más difícil", señaló.
Por su parte, el cardenal Mario Poli, sostuvo que "este año es distinto". "Sabemos que muchos tienen alguna promesa que cumplir por una gracia recibida de la Virgen y también para pedir por una cuestión especial que está atravesando la familia. Nosotros creemos que la Virgen escucha en cualquier lugar. En este tiempo tenemos que pedir muy especialmente para que Dios, por medio de la Santísima Virgen, nos libre de este flagelo que estamos padeciendo los argentinos. Tenemos muchos motivos para pedirle a nuestra Virgen de Luján".
