5 mayo 2024

La OMS hace foco en una enfermedad que padecen más de 1,6 millones de argentinos

Un estudio internacional llama la atención sobre la transmisión materno-infantil del Chagas, una enfermedad endémica que afecta -al menos- a 1,5 millones de argentinos.

"Es sabido que una mujer que realizó el tratamiento antes de estar embarazada ya no transmite Chagas y existen muchos casos de madres que han tenido un primer hijo, y hasta más de uno positivo, y que una vez que se trataron tuvieron un bebé sin Chagas", explica Marcelo Abril, director ejecutivo de la Fundación Mundo Sano. Se refiere al llamado que hicieron los expertos internacionales a controlar el riesgo de transmisión materno-infantil de la enfermedad de Chagas.

En Argentina, uno de los 21 países de América en los que la enfermedad es endémica, se estima que hay más de 1,6 millones de infectados y 7 millones de personas en riesgo de contraer la enfermedad. Sin embargo, el número que más preocupa es que 1.200 bebés nacen con Chagas y la mayoría de ellos no accede a diagnóstico o tratamiento.

Según un estudio publicado en la International Journal of Gynecology & Obstetrics, es fundamental realizar controles a través de un protocolo que incluya el cribado y el diagnóstico, tanto de embarazadas como de recién nacidos ya que esto permite evitar la transmisión de madre a hijo. En este sentido, Abril agregó que "Es importante hacer un abordaje a esa mujer en edad fértil, que aún no está programando su maternidad, para realizar el diagnóstico oportuno y, de resultar positiva, brindarle tratamiento, porque está demostrado que es una acción de control para los potenciales casos de Chagas de transmisión materno infantil".

Dicho estudio fue realizado por la Fundación Mundo Sano en el marco del Día por Una Argentina sin Chagas que se celebrará el próximo sábado 26 de agosto. El proyecto se llevó a cabo en conjunto con el Instituto Palacios de Salud de la Mujer (Madrid, España) y el Servicio de Microbiología y Parasitología, Hospital Universitario Virgen de la Arrixaca, Universidad de Murcia (España). También participaron del mismo el Servicio de Obstetricia y Ginecología, Hospital Universitario de Guadalajara, Ginecología y Obstetricia Universidad de Alcalá de Henares, el Centro de Microbiología, Instituto de Salud Carlos III, y el Departamento de Obstetricia y Ginecología, Universidad de Alcalá de Henares, Hospital Ramón y Cajal, todos de España.

Según los profesionales se Mundo Sano, la enfermedad de Chagas "es desatendida" aunque "constituye un problema de salud pública que requiere el compromiso de todos". Debido a esta falta de interés, a pesar de que el diagnóstico y tratamiento oportuno puede evitar la transmisión materno-infantil, la transmisión congénita se ha convertido en la principal vía de contagio de la enfermedad.

El riesgo de transmisión de madre a hijo se encuentra entre el 5 y el 12%, de acuerdo al estudio publicado en Journal of Gynecology & Obstetrics, siendo más alta en los países en los que la enfermedad es endémica. Debido a que se trata de una enfermedad que puede no presentar síntomas y ser transmitida en el embarazo, la Organización Mundial de la Salud recomienda enfáticamente el diagnóstico del Chagas a mujeres y recién nacidos de países que tengan antecedentes de transmisión vectorial, tal es el caso de Argentina donde la infección es transmitida por insectos.

Lo que se busca con esta estrategia es buscar a los pacientes asintomáticos no sólo para que estos puedan conocer su diagnóstico y los posibles tratamientos que hay disponibles sino también para trabajar en la visibilidad, divulgación y educación en torno a la enfermedad de Chagas e impulsar la formación de los equipos de atención primaria.

Cómo parte de esta estrategia, se recomienda que el recién nacido de una mujer con Chagas tenga seguimiento durante los primeros 9 meses de vida en caso de que resulte negativo el diagnóstico hecho luego del parto. También se recomienda un estudio periódico a los niños que viven en zonas donde la enfermedad de Chagas es endémica o cuyas madres estén infectadas.

En el 80% de los casos, Chagas es una enfermedad asintomática para los recién nacidos. Sin embargo, se deben descartar signos y síntomas típicos de la fase aguda ya que, si no se trata, puede ser crónica y, en ese caso, el 30% de los pacientes pueden desarrollar anomalías orgánicas, aumentando el riesgo de muerte prematura y discapacidad grave.

El diagnóstico temprano es el primer paso para que el recién nacido pueda recibir un tratamiento adecuado. Esto es fundamental ya que la tasa de curación para niños que han comenzado el tratamiento durante el primer año de vida oscila entre el 90 y el 100%.

Qué es la Enfermedad de Chagas y cómo se transmite

Se trata de una enfermedad parasitaria causada por el microorganismo Trypanosoma Cruzi. El Chagas se transmite por la picadura del insecto -vinchuca-, por transfusión sanguínea o trasplante de órganos, y durante la gestación o el trabajo de parto.

Esta enfermedad es endémica en 21 países de América Latina y los países con más casos son Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia y México. La enfermedad de Chagas ha llegado a diversos países debido a la transmisión materno-infantil.

Actualmente, se estima que en el mundo hay entre 6 y 8 millones de personas infectadas con Chagas, entre las cuáles un 20% son mujeres en edad fértil y por eso los organismos internacionales hacen foco en el diagnóstico de madres y recién nacidos ya que eso serviría para bajar la curva de contagios.