25 abril 2024

Día Internacional de las Manchas Cutáneas

La formación de las manchas en la piel es una preocupación cada vez más común en todas las edades. Pero ¿Qué son y por qué aparecen?

El proceso de formación de una mancha empieza en el momento en que la radiación solar incide sobre nuestra piel y ésta se defiende generando melanina.La melanina producida migra hacia la superficie de la epidermis y, por una disfunción del organismo, en vez de repartirse, de forma homogénea se concentra en un punto generando así una mancha cutánea.

La mayor parte de las manchas se intensifican por la exposición solar, aunque sus orígenes pueden ser diversos:

  • Melasma: Manchas de origen hormonal. Son manchas oscuras difusas e irregulares. Suelen presentarse a ambos lados del rostro, de forma simétrica, o en zonas expuestas al sol como los brazos. Se producen por el sol, pero pueden intensificarse por factores hormonales, estrés, reacción alérgica o uso/consumo de medicamentos.
  • Lentigos seniles: Manchas de origen solar o que aparecen por la edad. Son pardas, marrones o negras, planas, redondeadas y ovaladas, de bordes regulares. Aparecen aisladas o agrupadas, en el rostro, manos, cuello y espalda. Tienen un componente genético, además de una acumulación de una proteína llamada lipofuscina.
  • Manchas de origen post-inflamatorio: Manchas oscuras, irregulares y muy localizadas, desarrolladas tras una inflamación en la piel. La causa de su aparición se debe al incremento de síntesis de melanina en respuesta a una inflamación (irritación, infección cutánea, acné, peelings agresivos, terapias con láser…).
  • Vitíligo: Trastorno cutáneo caracterizado por la pérdida selectiva de melanocitos. Se caracteriza por la aparición de manchas blancas que pueden afectar a cualquier parte del cuerpo.

¿Cómo prevenir la aparición de las manchas oscuras en la piel?

La radiación solar es la mayor responsable de la aparición de las manchas cutáneas. Abusar de una exposición solar y sin la protección adecuada puede ocasionar quemaduras, la aceleración del envejecimiento cutáneo y la aparición de manchas cutáneas.

De ese modo, la mejor prevención frente a las manchas es la utilización diaria de un protector solar de amplio espectro que asegure una óptima protección frente a las radiaciones UVA, UVB, IR y HEV luz visible.

Las radiaciones solares inciden en la piel tanto en invierno como en verano, por eso es importante protegerse todos los días. Igualmente, en verano debemos ser aún más cuidadosos ya que los rayos inciden con mayor intensidad, aumentando los riesgos para nuestra piel.