25 abril 2024

Enojo empresario por un nuevo "impuesto encubierto" de la AFIP

Desde la Unión Industrial Argentina y desde la Cámara Argentina de Comercio salieron a criticar en duros términos la nueva medida del ente recaudador.

Una nueva alerta se encendió entre los empresarios argentinos por una serie de cambios dispuestos por la AFIP esta semana. Los empresarios advierten que se trata de un nuevo "impuesto encubierto" con el que el ente recaudador planea obtener más de un billón de pesos.

Hace unas horas fue la Unión Industrial Argentina (UIA) la que advirtió sobre este "impuesto encubierto". Esta mañana también lo hizo la Cámara Argentina de Comercio y ahora se sumó la primera plana empresaria.

“El Grupo de los 6 (G6) se manifestó hoy sobre la necesidad de no afectar el abastecimiento de bienes y equipamiento importado, a fin de evitar impactos negativos sobre la producción y el empleo”, indicaron en un comunicado.

“Es necesario que el país esté integrado al comercio internacional, como forma de desplegar sus capacidades productivas y de colocación de productos en los mercados internacionales”, dijeron y completaron: “En ese sentido, las medidas impositivas o de otra índole que dificultan o encarecen el acceso a bienes e insumos necesarios para la producción, deberían ser revisados. Esto incluye la reciente resolución de AFIP que modifica los regímenes de percepción de IIGG e IVA”. El G6 pidió “no seguir aumentando la presión fiscal sobre los sectores formales”.

La controvertida medida

El miércoles, la AFIP publicó en el Boletín Oficial la Resolución General 5339 o “Suspensión momentánea del certificado de exclusión en IVA y Ganancias”. Básicamente, implicó que el régimen de percepción que permitía, a través de un certificado de exclusión, que grandes empresas importadoras quedaran exentas del pago del Impuesto al Valor Agregado (IVA) y del Impuesto a las Ganancias fuera suspendido hasta el 31 de diciembre.

Cuando se importa se deben pagar derechos aduaneros, pero también percepciones impositivas (Ganancias, IVA y, a veces, Ingresos Brutos, impuestos por las provincias). Con determinadas condiciones, las empresas podían pedir un certificado de exclusión de percepciones. Esto sucedía si, por ejemplo, tenían saldos a favor en la AFIP. La actual resolución suspende esos certificados hasta fin de año, por lo que las empresas deberán pagar a pesar de que la agencia les deba plata (ese dinero es financiamiento a tasas negativas para el Tesoro). Tales percepciones que se pagarán ahora son recursos con los que no contará la futura administración. Esta situación no sólo suma recaudación al fisco. A la vez, puede servir para restringir aún más las importaciones. A las empresas les restará financiamiento.

Según la AFIP, la suspensión del régimen para las grandes empresas implicará un aumento aproximado de la recaudación tributaria en términos aduaneros del 20% en IVA y de un 6% en Ganancias. En términos de ingresos, se estima una cifra cercana a los $979.000 millones.

“La medida no es sustentable económicamente: implica un préstamo a tasa 0 por 9 meses de parte de las empresas importadoras argentinas al fisco por el equivalente a las percepciones por el 26% del valor de las importaciones de los próximos 9 meses (20% IVA, 6% IIGG), afectando de ese modo a las empresas que requieren insumos importados para su producción y/o realizan inversiones”, indicó la UIA en un comunicado.

La Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) también manifestó “su rechazo al incremento de la presión tributaria sobre las importaciones que se deriva de la Resolución General de AFIP N°5339, publicada días atrás”.