Un mega operativo se realizó en las últimas horas para desarticular una secta criminal que opera en el país y en Estados Unidos. Cómo operaba la banda acusada de delitos aberrantes.
En las últimas horas la policía realizó una serie de allanamientos con el fin de desbaratar una secta que operaba en Villa Crespo, en Buenos Aires y que tendría nexos internacionales. Con el avance de la investigación se conocieron detalles estremecedores de lo que ocurriría en el lugar.
Por orden del juez federal Ariel Lijo, los pesquisas realizaron más de 50 allanamientos en la provincia y dejó como resultado a 19 personas detenidas, sospechadas de trata y de ejercer ilegalmente la medicina, entre otros delitos. Asimismo, se elevó un pedido de captura internacional a otros miembros de la organización que si bien tiene base en el país, operaba en Estados Unidos.
El comisario inspector Ricarlo Juri dio detalles del procedimiento y sostuvo que la secta "captaba a personas en situación de vulnerabilidad y por una intervención seudo religiosa los convencen para despojarlo de los bienes". Por esta razón investigan si hay seguidores internados en centros de salud que no deberían estarlo.
Los detenidos tenían un discurso filosófico en el cual pregonaban terminar con "los males tales como el sida y las drogas" y "buscar el desarrollo de la felicidad". Para esto captaban a personas y los reducían a la condición de servidumbre. También les ofrecían tratamientos médicos que hacían en sus supuestas clínicas, con el fin de obtener dinero y las propiedades de sus seguidores.
Uno de los hechos más estremecedores es que los líderes ofrecían a sus adeptos para que tuvieran sexo con personas de poder y así conseguir más seguidores.
Los sospechosos están investigados por diferentes delitos, entre ellos trata de personas y lavado de activos. En los allanamientos lograron secuestrar un millón de pesos, más de un millón de dólares, libras esterlinas, una camioneta, juegos sexuales, material pornográfico, computadoras e historias clínicas.
En tanto, una de las víctimas que logró salir de la secta y denunció el hecho contó los aberrantes hechos que vivió en el lugar.
Pablo Salum sostuvo en diálogo con TN que fue el primer niño captado por la secta cuando tenía 8 años. “Los nenes era obligados a tener relaciones sexuales con adultos y con sus propios padres”, dijo el joven que loró escapar y denunciar el hecho en los '90.
