En una de las confederaciones, hay polémica por un mandato revocado a un dirigente que apoyó la protesta. En otra, siguen los pases de factura internos, que también llegan a la Mesa de Enlace nacional.
“Después de lo del sábado, los que apoyábamos la protesta hoy estamos como en el del videíto de Guillermo Francella en el que dice: ‘Hermosa mañana, verdad’”.
La frase pertenece a un dirigente de una de las confederaciones rurales que integran Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) y que apoyaba la participación de esta entidad en la histórica protesta que se realizó el último sábado en la Ciudad de Buenos Aires, a contramano de lo que se decidió en el consejo directivo.
Tras el éxito que tuvo la movilización, este lunes en una reunión de Mesa Ejecutiva de CRA, volvieron a alzar la voz las tres confederaciones que estaban a favor de participar de la movilización -las de Córdoba, Santiago del Estero y San Luis- y que perdieron en la votación frente a la postura del resto, liderada por la Confederación de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), que opinó en contra de asistir.
La interpretación que hacen del lado de las entidades que pedían acompañar el reclamo promovido por productores autoconvocados es que el líder de CRA, Jorge Chemes, quedó en situación de debilidad. Y que la entidad debería ahora darles algún tipo de explicación a sus asociados, más allá de que algunos de sus dirigentes ya mencionaron que la decisión fue tomada por votación y luego de consultar a sociedades rurales de base.
La interna que se abrió allí quedó expuesta el mismo sábado cuando estuvo presente en Plaza de Mayo el vicepresidente de CRA, Gabriel De Raedemaeker, que proviene de una de las confederaciones que votó a favor de asistir: Cartez, que nuclea fundamentalmente a las rurales de Córdoba.
Mesa de Enlace
En paralelo, en el inicio de la noche porteña, en la Sociedad Rural de Palermo, está previsto que tenga lugar una reunión de la Comisión de Enlace nacional, en la que también se prevé una discusión profunda sobre lo sucedido el sábado.
Vale mencionar que la Mesa no manifestó explícitamente su no aval a esta movilización, pero había un acuerdo implícito entre las cuatro entidades de no apoyarla.
Sin embargo, a último momento el titular de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Nicolás Pino, dijo por los medios que “donde haya un productor protestando, la SRA estará apoyando” y, de alguna manera, eso fue interpretado por otras entidades de mala manera, ya que no respetaba lo supuestamente convenido.
Polémica en Coninagro
Y como corolario de las polémicas vinculadas al #23A, el mismo sábado se dio a conocer que la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA) decidió revocarle al cordobés Alejandro Buttiero, titular de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro) Córdoba, su mandato como consejero nacional de la entidad.
Los trascendidos que se hicieron circular apuntaban a que fue el propio presidente de Coninagro a nivel nacional, Carlos Iannizzotto, el que pidió apartar a Buttiero, por haber avalado la protesta.
Sucede que la Mesa de Enlace de Córdoba se despegó de la nacional: expresó en su momento el acompañamiento a la movilización y Coninagro firmó ese documento, contrariando la decisión tomada a nivel país.
En diálogo con Infocampo, Iannizzotto negó estas acusaciones, dijo que no sabía nada al respecto y que recién el domingo le fue comunicada por ACA su decisión de quitarle a Buttiero su silla en el consejo nacional.
Pero la realidad es que Buttiero ya no formará parte del máximo órgano directivo de Coninagro, aunque sí permanecerá como representante del consejo regional cordobés.
Crédito: Infocampo