Este martes, luego de pedalear 15 mil kilómetros, Carlos arribó a "La Feliz" para reencontrarse con su novia.
Un mes de entrenamiento de 30 kilómetros por día, mucho amor y el apoyo de la gente hicieron que el mexicano llegara para ver a su novia, Agustina. “Nos conocimos hace 5 años, estuvimos yendo y viniendo. Luego pegó pandemia, ella iba a ir a México, no se pudo. Vendí mis cosas y me vine. La gente ve que lo haces de corazón por cumplir sueños y te apoyan con comida, hospedaje y plata. Hice el viaje con la gente, si la gente no fuera buena no podría hacerlo”, explicó.
Entre sus pocas pertenencias tenía una bolsa de dormir, un colchón inflable, ropa, agua, una carpa, impermeable y una cocina de emergencia, y comentó: “Hay pueblos en los que no hay nada. El camino me entrenó, no necesitas tanto sino animarte”.
“Estoy muy feliz porque la gente de Argentina es muy linda con el viajero y estoy muy ilusionado de conocer Mar del Plata”, completó desde la ruta 2 en los brazos de su novia.