23 abril 2024

Aparecieron restos de un gliptodonte en Santiago del Estero

Fueron encontrados en la cuenca del río Dulce y "contaría con una masa corporal que supera la tonelada y puede alcanzar los 2,5 a 3 metros de longitud"

En Santiago del Estero se encontraron los restos de un gliptodonte, pertenecientes al género Panochthus sp. y que por su "morfología da cuenta de un ejemplar no registrado para la región Chaco austral y se trataría de uno de los de mayor tamaño encontrados en nuestra provincia", explicaron los expertos de la Dirección General de Patrimonio Cultural.

Los restos hallados son placas óseas que formaban la coraza del dinosaurio y aparecieron en la cuenca del río Dulce, a la altura de Los Miranda (departamento Río Hondo). El registro incompleto fue identificado por un equipo de paleontólogos conformado por Raúl Vezzosi (Conicet, Uader) Pablo Gaudioso (Conicet, IML) y Andrés Rinderknecht (Mnhn).

Los estudiosos expresaron que "la morfología observada da cuenta de un ejemplar no registrado para la región Chaco austral durante el cuaternario, de modo que por su relevancia es menester profundizar en el estudio de este singular fósil pleistocénico".

Se trata de un "representante extinto de la mega fauna local" dijeron y, agregaron que "se trataría de uno de los gliptodontes de mayor tamaño encontrados actualmente en nuestra provincia".

Por su parte, la responsable del área de Antropología y Ciencias Naturales, Analía Sbattella, reveló que a "diferencia de los recuperados recientemente por esta Dirección, uno en Weisburd y otro en Campo Gallo, este ejemplar contaría con una masa corporal que supera la tonelada y puede alcanzar los 2,5 a 3 metros de longitud". "Eran herbívoros especializados que habitaron en espacios abiertos bajo un clima frío y seco", dijo.

A la vez los especialistas manifestaron que "si bien se trata de animales de gran antigüedad (35 millones de años), las características que se evidencian de este registro y la antigüedad de los sedimentos que lo contenían podrían ubicarlo temporalmente entre el Pleistoceno final y comienzos del Holoceno (126000 - 11000 Antes del Presente/AP)".

También detallaron que la aparición reciente en el lecho del río pudo ser provocada por la acción erosiva que ejerce el mismo sobre los diferentes estratos sedimentarios, particularmente en aquellos que suelen alojar restos fósiles. Luego añadieron que en esta oportunidad este antiguo acorazado quedó al descubierto por el descenso del nivel del agua.

Fueron los vecinos Franco Salas, Ezequiel Melián, Adrián Matiello, Exequiel Aragón y Antonio Sandoval quienes dieron aviso y colaboraron en el rescate, junto al personal técnico de la Dirección y a Adolfo Mussi, instructor y presidente de la Escuela de Canotaje "Palas Santiagueñas", quien pudo coordinar y prestar equipamiento adecuado para facilitar su extracción del río.

Una vez finalizado el rescate, los restos fueron depositados en las dependencias de la Dirección General de Patrimonio Cultural con el objeto de "ser resguardados para la realización de estudios, enmarcados dentro del proyecto de investigación que lleva adelante el equipo de profesionales sobre la Paleontología del Neógeno de Santiago del Estero".