20 abril 2024

Que osa! Sería hermosa


El descubrimiento fue en una tosquera en la localidad bonaerense de Carmen de Areco. Aparentemente, pertenece a un ejemplar hembra y por el momento hallaron parte del cráneo y algunas vértebras.

Viernes, 13 de noviembre de 2020.

Investigadores del Museo de La Plata hallaron una especie de oso en una tosquera en la localidad de Carmen de Areco, aproximadamente a 150 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires.

Según informan los descubridores, se trata del ejemplar más grande del que se tiene conocimiento, y aparentemente sería una hembra.

Esta especie se conoce con el nombre de Arctotherium angustidens y vivió durante la edad Ensenadense, que fue desde los 1.7 millones de años hasta los 400 mil años antes del presente, y se caracterizó por tener los osos de mayor masa corporal registrada.

El autor principal del estudio,  Leopoldo Soilbelzon, doctor y experto en el estudio de osos fósiles, participó del rescate de este nuevo espécimen. “Se trata de un individuo adulto y, por su tamaño, estimamos que se podría tratar de una hembra”, indicó a la Agencia CTyS-UNLaM.

“En vida, podría haber superado los dos metros de altura en posición erguida”, resaltó Soilbelzon, y agregó: “Según estudios recientes, pudimos estimar que el ejemplar más grande de esta especie podría haber alcanzado, incluso, hasta los cuatro metros y medio de altura parado en las dos patas traseras”.

Junto al doctor, participó también del rescate el becario doctoral Facundo Iacona, quien dio detalles acerca de las partes que se recuperaron, como parte del cráneo y algunas vértebras de este animal. “Esto fue posible gracias a que tanto el operario de la máquina retroexcavadora que hizo el hallazgo, Ramón Garicox, como los dueños de la cantera, con muy buen criterio y haciendo lo que se tiene que hacer en estos casos, denunciaron la aparición de estos fósiles al Centro de Registro del Patrimonio Arqueológico y Paleontológico de la Dirección Provincial de Patrimonio Cultural”, destacó el becario.

Inmediatamente se comunicó la Dirección Provincial con el Museo de La Plata para que se efectuara la labor de rescate.

De esta forma, tras la preparación de sus restos, quedó alojada en el Museo Histórico de Carmen de Areco, donde podrá comenzar a ser visitada por estudiantes de distintas escuelas y por los habitantes de dicha ciudad y alrededores en algunos meses.

Durante cientos de miles de años, este ejemplar estuvo enterrado a unos ocho metros de profundidad. “Si bien se encontró solamente el cráneo y unas vértebras, probablemente, había otras partes de su cuerpo en el sitio, pero como fue desenterrado por una máquina excavadora, otros fragmentos pueden haberse perdido”, consideró Soibelzon.

Una vez en el sitio, lo primero que hicieron fue recolectar los fragmentos que se encontraban dispersos. “Luego, vimos el cráneo, y se observaba parte del maxilar con dientes, y establecimos los límites del cráneo teniendo en cuenta que se trataba de un Arctotherium angustidens, también conocido con el nombre de osos de rostro corto”, resaltó Iacona.

Acto seguido, los paleontólogos armaron lo que se conoce con el nombre de “bochón”, a través del cual se le dio una forma de hongo al sedimento que contenía al fósil y se protegió al material durante la extracción y hasta su traslado al Museo de Carmen de Areco.

El becario se refirió a la importancia como valor patrimonial y en relación investigaciones futuras. “Además de la importancia científica que tiene este material, que quedará disponible en el Museo para futuras investigaciones, también tiene un valor patrimonial, ya que permite a la comunidad conocer una parte de la prehistoria de la región”, destacó Iacona.

Por su parte, el autor principal del estudio habló al respecto sobre los hallazgos en Sudamérica. “Sólo se han encontrado ejemplares de esta especie de osos rostro corto en la región pamepeana y en Tarija, Bolivia; no fueron hallados en ningún otro lugar hasta el momento”, concluyó el doctor Soibelzon.