19 abril 2024

Saladillo: ELECTROMEDICINA EN LA REGIÓN

Lunes 23 de Noviembre de 2015.

Argus, que se creó en 2006, se dedica al diseño y la fabricación de dispositivos que favorecen la accesibilidad en personas discapacitadas. No sólo trabajan con clientes de esa región bonaerense, sino también de Buenos Aires y otras provincias.
argus
Los saladillenses Gustavo Clos y Armando Greco son parte de Argus Electromedicina, un emprendimiento que se dedica al diseño y la fabricación de dispositivos que favorecen la accesibilidad en personas discapacitadas, que, al menos en esa región bonaerense, resulta inédito.
Se trata de una firma que se creó en 2006, y tras menos de una década, lograron no sólo trabajar para clientes de Saladillo y la zona, sino también de Buenos Aires y otras provincias.
Según contaron al diario La Mañana de 25 de Mayo, entre otros productos, han fabricado una inyectora de contraste, que es única en el país y funciona en la sala de tomografía del sanatorio saladillense. Allí también construyeron para el hogar de ancianos elevadores para trasladar a las personas de las camas a las sillas de ruedas.
Entre sus productos más demandados se encuentran elevadores adaptados a vehículos y piscinas para personas que se movilizan en sillas de ruedas. Asimismo, para las viviendas que cuentan con escaleras en su interior, hay muchas opciones para favorecer el desplazamiento de las personas discapacitadas: desde ascensores hasta equipos que se adaptan a las propias escaleras. A ello también se dedican. También, incluyeron la reparación de equipamiento médico, como electrocardiógrafos, electrobisturíes y equipos odontológicos.
“El trabajo que hacemos es a medida. El cliente solicita lo que necesita y nosotros se lo diseñamos y fabricamos. Es algo personalizado”, indicó armando en diálogo con el mencionado matutino, quien reconoció que al ser algo personalizado y artesanal, tanto el diseño como la fabricación, tienen sus tiempos.
Por su parte, el ingeniero Clos destacó que “los valores son accesibles y hay muchas opciones. Por supuesto que un equipo totalmente automatizado cuesta más que uno manual. Más allá de eso, los precios son razonables. Nuestros productos cuestan la tercera parte de lo que valen en el mercado, sin contar los gastos de traslado”. “Aparte, el hecho de ser del interior nos permite un contacto directo con el cliente. Si la persona compra el equipo en Buenos Aires, es distinto”, comparó.
En cuanto a los materiales, la mayoría de los insumos se consiguen en Saladillo y otros, por lo general los elementos electromecánicos, son traídos de Buenos Aires.
Argus electromedicina, que en estos momentos trabaja en el diseño de una nueva inyectora, tiene previsto dedicarse a un rubro determinado para poder fabricar en serie y ampliar la producción.
“A medida que avanzamos, incorporamos equipos tanto para la parte electrónica como para los trabajos que tienden a mejor la calidad de vida de las personas”, expresó Clos.