25 abril 2024

LIBROS QUE LLORAN


A causa de la cuarentena preventiva y obligatoria, el sector editorial local vive uno de los peores cuatrimestres en la historia.

Lunes, 4 de mayo de 2020

En marzo y abril se registraron caídas en la producción en las ventas y también en el registro de novedades y reediciones. Con las imprentas cerradas o solo autorizadas para imprimir prospectos de la industria farmacéutica y otros bienes esenciales, con librerías y otros puntos de venta reducidos al comercio digital y la 46ª Feria Internacional del Libro de Buenos Aires suspendida hasta nuevo aviso , las editoriales debieron postergar el lanzamiento de nuevos títulos.

En marzo, la Agencia Argentina de ISBN (administrada por la Cámara Argentina del Libro, CAL, desde 1982) informó una caída del 15% en el registro de libros respecto de marzo de 2019, y del 50% en abril, también en comparación con el mismo mes del año pasado. Con estas cifras, se acelera la crisis en el sector editorial , en caída libre desde 2016. En marzo de este año se registraron 1258 novedades; en marzo de 2019, se habían registrado 2007 (y en marzo de 2016, 1736).

En el informe "Impacto de las medidas de distanciamiento social obligatorias en la producción editorial", las cifras sobre producción son alarmantes. Mientras que en abril de 2019 se habían producido más de cinco millones de ejemplares, en abril de este año se produjeron apenas quinientos mil. En cantidad de ejemplares, la producción en el primer cuatrimestre cae a la mitad respecto del mismo periodo de 2019. "Iba a ser un cuatrimestre malo y con la pandemia fue catastrófico", indica Martín Gremmelspacher, presidente de la CAL.

Pese a que el Gobierno autorizó la venta online y la entrega del libros a domicilio , la caída en las ventas alcanzó en el primer cuatrimestre del año un 80%, según informaron los socios de la CAL. Ese porcentaje se explica por los más de cuarenta días de aislamiento preventivo, que también repercutieron en forma negativa en otras industrias. "La venta online es marginal", dice Gremmelspacher. Se estima que mayo sea aun peor.

La cadena de pagos en muchos casos se ha roto y en las editoriales se prevé que las próximas ventas a las librerías se harán en firme y ya no a cuenta. Desde el sector, se elevaron solicitudes y pedidos de apoyo al Ministerio de Cultura de la Nación, que podría traducirse en una compra de libros por parte del Ministerio de Educación y subsidios a las editoriales y librerías para asegurar la subsistencia. De manera directa, en el sector editorial trabajan diez mil personas, y de manera indirecta, otras quince mil.

 

El e-book, también histórico

Por primera vez, se registraron en el ISBN más libros electrónicos que títulos en papel. En marzo de este año, se duplicó el registro de ebooks comparado con el año pasado y en abril, el porcentaje alcanza el 70% respecto del mismo mes en 2019. De hecho, el porcentaje de registros de libros en el mes pasado se explica en parte por este cambio de soporte, de papel a digital. De lo contrario, el porcentaje de caída hubiera sido mayor al 50%. Parte importante de esos libros digitales ya estaban en papel, otros son "nativos digitales". Esto se entiende porque las editoriales, ante la imposibilidad de comercializar los ejemplares físicos, se lanzaron a convertir sus catálogos de libros en papel en ebooks. Por la emergencia sanitaria, hubo lanzamientos de títulos solo en formato digital .

Si bien algunas editoriales lanzaron novedades en físico, por ahora esos ejemplares no llegaron a las librerías, porque la distribución tampoco ha sido autorizada por el Gobierno nacional. Como la mayoría de la ciudadanía, los libros siguen en cuarentena. [La Nación]