23 abril 2024

La culpa es de la cuarentena...


8 de cada 10 argentinos confirman que la cuarentena aumentó su deseo de ser infieles - Si bien la cuarentena puede dificultar la conexión con una pareja extramarital, un aumento reciente en los nuevos usuarios de sitios de parejas sugiere que muchas personas están preparadas para el desafío.



Jueves 22 de octubre de 2020.

Ni las proyecciones más específicas hubieran podido dar con el panorama que atravesamos hoy en día. La escala de crecimiento de la pandemia originada por el COVID-19 ha puesto en jaque todos los protocolos a nivel global. Dentro de este contexto, las relaciones personales y contacto físico han cambiado sus costumbres para siempre pero dentro de la revolución social que esto generó solo una actividad persiste y, de hecho, se ha intensificado notablemente: el uso de Internet, celulares y dispositivos tecnológicos.

Increíblemente en este contexto adverso, las citas online se han mantenido vigentes durante este periodo de confinamiento. Es por eso que Second Love, el sitio de citas online exclusivo para infieles, realizó una encuesta anónima a sus usuarios de Argentina y reveló que el 50% de los usuarios utiliza el portal en igual medida que antes de la pandemia, el 88% de ellos ha tenido una sola cita durante la cuarentena y el 85% de ellos confirmó que ha tomado todas las medidas de distanciamiento social y no contacto físico por miedo al contagio al encontrarse. Sin embargo, más de la mitad declaró no tener miedo de contraer la enfermedad en una cita.
Paralelamente, los resultados revelan que sólo el 40% de los usuarios declaró haber utilizado las videollamadas para intimidar o tener una cita virtual, y que 8 de cada 10 confiesan que la cuarentena aumentó su deseo de conocer otras personas por fuera de sus relaciones estables.

“En la actual situación de confinamiento social, muchas parejas se enfrentan a una convivencia de tiempo completo -veinticuatro por siete-, no solo duermen juntos, sino que desayunan, almuerzan, meriendan, cenan, trabajan, cocinan, van de compras, limpian y hasta hacen actividad física juntos. Es posible, que para algunos esta escena algo atípica sea un pleno disfrute, una oportunidad única de compartirlo todo con el otro. Sin embargo, la lógica del todo, del full time, suele ser para muchos agotadora y complotar contra el deseo”, aseguró en diálogo con este medio la psicoanalista Agustina Fernández, miembro de la Asociación Psicoanalítica Argentina.
Para la especialista, “el deseo se enciende con lo que no se tiene, con aquello que falta, incluso con lo prohibido”. “El encierro obligado por la pandemia es vivido por muchos sujetos como un atrapamiento que les resulta asfixiante y el impedimento de salir les es subjetivamente insoportable. Son diversas las formas subjetivas de vérselas con eso, para algunos la respuesta aparece por el lado de la transgresión. El ‘salir transgresivo’ se convierte en aire fresco que los vitaliza. Y claro, dependerá de cada quién, si saldrá a caminar por la calle, a tomar café con amigos, a una partida de póker o los brazos de un amante”, añadió Fernández.