Elaboró un alfajor por una broma futbolera y es un boom de ventas. La cordobesa Miryam Díaz se inspiró en una tradicional burla que se solía escuchar en las canchas de fútbol.
Miércoles, 5 de febrero de 2020.
"Sos un alfajor de pollo porque no existís". La burla que un hincha de fútbol le dedicó otro, simpatizante de un equipo rival, inspiró a una cordobesa que hoy se convirtió en noticia por el furor que generó su insólito emprendimiento.
Se trata de Miryam Díaz, quien se animó hacer y vender alfajores de pollo, cabrito y ternera. En una nota con LU5, la creadora de los exitosos alfajores, confesó que la idea se le ocurrió escuchando la radio una mañana.
"Lo primero que pensé fue que sería salado, pensé en que lo podía hacer existir, que no podía ser tan difícil. Después de varias pruebas salió, muy rico", contó la mujer, oriunda de Nono, en diálogo con Diego Sarco, el conductor del programa Todo bien.
Miryam creo el manjar que tuvo gran éxito en Valle de Traslasierra, a base de pechuga, pata y muslo, laurel, orégano y cebolla de verdeo. "Lo condimentamos bien. El pollo tiene mucha nobleza, te permite llevarlo hacia un champiñón o roquefort. Después generé una masa sutilmente salada, bastante suave, para que lo acompañe bien", precisó.
"Hice también una opción vegana que va con berenjena, champiñón y morrón y acabo de agregar cerdo a la mostaza con romero y actualmente estoy pensando hacer un vitel toné", adelantó.
"Además de ser una buena comida, con buen valor alimenticio, al ser en formato alfajor, es fácil de comer. lo podés comer caminando, o lo podés llevar a una reunión. te da otra dimensión", destacó y agregó que su producto es ideal para la población infantil. "Un alfajor es un almuerzo para un niño de 8 años. Con el alfajor y una fruta, el niño comió bien", subrayó Miryam.
La mujer remarcó que su producto tiene una "larga conservación" porque utiliza "ingredientes como la manteca que le dan larga durabilidad". "En la heladera se conserva muchos días, mientras que fuera de la heladera, puede estar seis o siete horas tranquilamente, siempre que se tomen las precauciones para que no le de el sol", indicó.
"La gente lo puede consumir con un café, una cerveza o con un vino", postuló la mujer que vende cada alfajor de pollo a 50 pesos. La unidad que pesa el 80 gramos, el doble que un alfajor de dulce de leche.
