La salud de los recién nacidos se verá afectada.
Viernes, 15 de noviembre de 2019.
De acuerdo a una investigación de colaboración internacional y multidisciplinaria, los niños que nazcan en estos tiempos serán los más afectados por los efectos del cambio climático: tendrán más riesgos de padecer problemas respiratorios y cardiovasculares, estarán más expuestos a enfermedades infecciosas y psicológicas, se agravará la malnutrición y presenciarán olas de calores y tormentas más intensas.
El informe "Lancet Countdown: traking progress on health and climate change (seguimiento del progreso en salud y cambio climático, en español)" se basó en el trabajo de más de 100 expertos de 35 instituciones de diferentes países entre los que hay meteorólogos, ecologistas, matemáticos, ingenieros, expertos en energía, alimentación y transporte, economistas, científicos sociales y políticos, médicos y otros profesionales de salud pública. En conjunto, analizaron 41 indicadores para demostrar qué repercusiones tiene para la salud pública mundial cumplir las metas del Acuerdo de París y sus consecuencias si esto no se cumple.
Entre sus conclusiones, señalaron que los niños ya están sufriendo la crisis climática y quienes nacerán en estos tiempos tendrán severas complicaciones.
Los sistemas inmunitarios de los menores de edad son más susceptibles a las enfermedades y contaminantes medioambientales ya que recién se encuentran en proceso de desarrollo. Así, los daños durante la primera infancia son persistentes y llevan repercusiones sanitarias durarán toda la vida. Si no se frena el calentamiento global, un niño que nazca hoy se enfrentará a un mundo con temperaturas medias cuatro grados más altas antes de cumplir 71 años, lo que supondrá una amenaza para su salud a lo largo de cada etapa de su vida. Por ejemplo, en el estudio indicaron que el ascenso marcado en los termómetros generó los incendios forestales en Siberia, Australia y California, Estados Unidos, y esto provocó que la población sufriera más asma, infecciones respiratorias e insolación.
En tanto, las cosechas de vegetales también se verán enormemente influidas, particularmente el maíz, el trigo, la soja o el arroz. Esto ocasionará malnutrición y la subida de los precios. Por su parte, las posibles condiciones climáticas son propicias para que se diseminen las bacterias que causan las enfermedades diarreicas, para que aumenten los brotes de cólera en países donde la enfermedad no es frecuente o para que se propaguen más rápidamente patologías como el dengue. De hecho, los mosquitos que transmiten el virus ya invadieron nuevos territorios en Europa y la mitad de la población mundial está en zonas de peligro.
La contaminación del aire originará una reducción de la función pulmonar, un empeoramiento del asma y otras enfermedades respiratorias. A su vez, incrementará el riesgo de infartos de miocardio y accidentes cerebrovasculares.
La contaminación del aire originará una reducción de la función pulmonar y aumento de infartos y ACV.
Se diseminarán las bacterias que causan enfermedades diarreicas.
